A inicios de julio, Southern Peru Copper Corporation (Grupo México) anunció el reinicio de las actividades para desarrollar el proyecto de cobre Tía María, ubicado en la provincia de Islay (Arequipa). Ahora, la minera planteó realizar modificaciones en esta unidad con una inversión estimada en más de US$4 millones, ¿de qué trata?
La minera del Grupo México presentó el segundo informe técnico sustentatorio (ITS) de la unidad minera Tía María ante el Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace). El documento propone la ampliación, modificación y reubicación de instalaciones para dar soporte a las actividades de operación del referido proyecto minero.
El presupuesto de capital total estimado para Tía María asciende a US$1,400 millones, aunque la compañía prevé actualizar dicho monto. La firma estima producir 120,000 toneladas de cátodos de cobre por año en esa unidad minera.
Las modificaciones planteadas
En detalle, Southern apunta a ampliar las instalaciones del campamento para obtener mayor capacidad de alojamiento con un incremento de 55 a 120 personas, así como mejores servicios para el personal. Además, implementará un mástil de bandera definitivo.
Asimismo, busca modificar la subestación eléctrica (SE) Tía María para cubrir los requerimientos de niveles de tensión del proyecto. Así, estima cambiar los suministros eléctricos en niveles de tensión de 220 kilovoltio (kV) / 69kV / 23kV.
Otra de las variaciones propuestas es cambiar el trazo del acceso que une las áreas de la unidad minera Tía María desde Pampa Cachendo hasta el tajo La Tapada. De esta manera, el ancho de diseño del camino permitirá el tránsito de los camiones mineros, que serán ensamblados en las plataformas ubicadas en Pampa Cachendo, y permitirán acceder hasta la zona de extracción en el tajo La Tapada, tajo Tía María y plataformas complementarias.
Finalmente, la empresa contempla reubicar las coordenadas de ubicación del depósito de ripios, de la pila dinámica de lixiviación y componentes auxiliares, retornando a su ubicación inicial aprobada en el Estudio de Impacto Ambiental (EIA), más no se consideran nuevas instalaciones y/o nuevos equipos. Vale precisar que no son componentes existentes, es decir, aún no han sido construidos.
Por otro lado, la minera precisa que las actividades de implementación se desarrollarán durante la etapa de operación de la unidad minera Tía María. Así, se espera que la etapa de construcción de los componentes propuestos sea en máximo 27 meses, encontrándose dentro del periodo que se establece en el EIA aprobado.