A medida que la demanda de metales base y vehículos eléctricos se espera que disminuya junto con el crecimiento global en 2024, dos metales muy diferentes probablemente se destaquen del grupo de materias primas: el oro y el uranio.

El Oro: Un Clásico Refugio de Valor

El oro, apreciado a lo largo de la historia humana, es prácticamente indestructible. Esto significa que la mayoría de los más de 6.7 mil millones de onzas del metal que el Consejo Mundial del Oro estima que se ha extraído alguna vez, sigue existiendo en alguna parte, ya sea como anillo de bodas o en una barra de oro de 400 onzas troy almacenada detrás de puertas a prueba de explosiones en la ultra-segura bóveda de oro de Fort Knox en Kentucky.

Uranio: Un Metal con un Futuro Prometedor

Por otro lado, el uranio fue descubierto más recientemente. Se extrajo por primera vez para obtener radio (un producto de descomposición del uranio descubierto por Marie y Pierre Curie) a principios del 1900 y se pensó erróneamente que tenía propiedades anticancerígenas. Luego se extrajo a una escala mucho mayor a partir de la década de 1940 en la carrera para crear las primeras armas nucleares. Ahora, la energía es el uso dominante del uranio, que se ha valorado más por sus cualidades amigables con el clima que por su potencial destructivo.

Desempeño de los Metales en 2023

Tanto el oro como el uranio tuvieron un fuerte desempeño en 2023. El oro mostró una sorprendente resistencia frente a cuatro aumentos de tasas de interés (además de siete el año anterior), y a mediados de diciembre estaba alrededor de US$2,019.60 por onza. Eso está por encima del mágico nivel de resistencia de US$2,000 y un 10.7% más alto que al inicio del año.