Daura Gold Corp anunció la ampliación de su colocación privada sin intermediarios hasta alcanzar un monto bruto de US$ 6.5 millones, impulsada por el sólido interés de los inversionistas. La oferta incluye hasta 26 millones de unidades a un precio de US$ 0.25 por unidad. Cada unidad estará compuesta por una acción ordinaria y medio warrant, lo que significa que un warrant completo permitirá adquirir una acción adicional a US$ 0.375 en un plazo de 24 meses desde el cierre de la operación.
La compañía señaló que los fondos recaudados se destinarán principalmente a avanzar en sus proyectos de exploración de oro y plata en el departamento de Áncash, Perú. Entre estos destacan Antonella, su proyecto insignia, y Yanamina, ubicado a unos 40 kilómetros al norte. Una parte del capital también será destinada a cubrir necesidades de capital de trabajo para operaciones generales.
Con más de 15,900 hectáreas en concesiones de exploración en Áncash, Daura Gold busca afianzar su posición en esta región minera del norte peruano. Además de Antonella, que abarca 900 hectáreas, la compañía posee el bloque Libélulas de 2,900 hectáreas, uno de los focos actuales de su estrategia de expansión. Daura informó que pagará comisiones a terceros que hayan presentado suscriptores a la colocación, y que los valores emitidos estarán sujetos a un periodo de reventa restringida de cuatro meses y un día, conforme a las regulaciones del mercado canadiense.
La operación sigue sujeta a la aprobación de la Bolsa de Valores de Toronto (TSX). Mientras tanto, los resultados de exploración en Antonella continúan generando expectativas. Durante su más reciente campaña, la empresa recolectó 47 muestras de roca, de las cuales 19 superaron los 100 g/t de plata y seis excedieron los 10 g/t de oro, con valores máximos de hasta 650 g/t de plata y 22.6 g/t de oro.
Entre los hallazgos más destacados figuran combinaciones de alta ley, como 22.6 g/t de oro y 101 g/t de plata, 17.65 g/t de oro y 348 g/t de plata, y 16.05 g/t de oro con 320 g/t de plata. Además, los trabajos de mapeo geológico confirmaron la extensión de las vetas hacia el suroeste, en dirección al proyecto Bonita, operado por Highlander Silver. Las estructuras Esperanza y Romina presentan longitudes de hasta 350 metros y espesores de entre 0.5 y 0.8 metros, con ramificaciones mineralizadas que sugieren un sistema epitermal polimetálico con presencia de oro, plata, plomo y cobre.