La minera brasileña Vale S.A. confirmó la distribución de 0,67 dólares por acción dentro de su programa de retribución a los accionistas, combinando dividendos ordinarios e intereses sobre capital propio. La decisión, aprobada por su Consejo de Administración, contempla un pago dividido en dos etapas que se ejecutará el 7 de enero y el 4 de marzo de 2026.

De acuerdo con la comunicación oficial, el monto total ascenderá a 3,58 reales por acción. En la primera fase, la compañía desembolsará 1,24 reales como dividendo ordinario. En la segunda, programada para marzo, se entregarán 0,77 reales adicionales, junto con 1,57 reales correspondientes al interés sobre capital propio, manteniendo un esquema financiero que Vale ha aplicado de manera consistente en los últimos trimestres.

La empresa destacó que esta distribución se calcula bajo su política de disciplina financiera, que toma en cuenta la generación de caja, el nivel de deuda neta ampliada y los compromisos de inversión programados. Este enfoque permite modular los pagos sin comprometer el equilibrio operativo.

En su informe correspondiente al tercer trimestre de 2025, Vale registró una utilidad neta de 2.84 mil millones de dólares, cifra que representa un avance del 11 % respecto al mismo periodo del año anterior. La minera atribuyó este desempeño a la estabilidad en los precios del mineral de hierro y a las mejoras de eficiencia implementadas en sus operaciones.

El mineral de hierro, principal producto de la compañía, ha mantenido precios superiores a los 100 dólares por tonelada durante buena parte del año. Este escenario favorece especialmente a productores de bajo costo como Vale, que además continúa beneficiándose de la demanda sostenida proveniente de Asia, con China como su mercado más relevante.

En términos estratégicos, Vale reiteró que no contempla adquisiciones de gran escala en el corto plazo. El director financiero, Gustavo Pimenta, señaló en octubre que la prioridad sigue siendo generar valor directo para los accionistas, manteniendo una postura conservadora y un estricto control del apalancamiento.

El impacto del anuncio también se reflejó en los mercados bursátiles. Las acciones de Vale en la Bolsa de São Paulo (B3) mostraron un repunte tras la comunicación del pago, mientras que los papeles negociados en la Bolsa de Nueva York (NYSE: VALE) consolidaron su comportamiento positivo, reafirmando la presencia global de la empresa.

En materia de gobierno corporativo, la distribución aprobada se ajusta a la normativa brasileña referente al interés sobre capital propio, un mecanismo que históricamente ha permitido a las empresas del país optimizar el retorno al accionista mediante beneficios fiscales. Vale, como es habitual, mantiene este instrumento dentro de su estructura de remuneración.

En el plano operativo, la compañía continúa avanzando en proyectos clave como la expansión de S11D en Pará, considerado el mayor complejo minero de mineral de hierro a nivel mundial. Paralelamente, sigue impulsando iniciativas de descarbonización y fortaleciendo la seguridad operacional, con mejoras en sus sistemas de monitoreo y en la gestión ambiental.