El presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), Julio Velarde, destacó que el país atraviesa un momento especialmente favorable en cuanto a los términos de intercambio, un indicador clave que mide la relación entre los precios de exportación e importación. Cuando los productos que exporta el país, como los minerales, tienen mejores precios que los bienes importados, la economía se ve beneficiada con mayores ingresos externos.
Durante su exposición ante la Comisión de Presupuesto del Congreso, Velarde señaló que no se veían precios tan altos para los minerales desde la década de 1950, en el gobierno de Manuel Odría. “Esperamos que esta tendencia se mantenga, especialmente por la transición energética global y la creciente demanda de electricidad impulsada por tecnologías como la inteligencia artificial. En ese contexto, el precio del cobre podría mantenerse elevado por un periodo prolongado”, explicó.
Gracias a este panorama, el titular del BCRP proyectó que en 2025 el superávit comercial del Perú podría alcanzar los US$30.000 millones, una cifra muy superior a la de años anteriores. Asimismo, estimó que las exportaciones totales del país podrían superar los US$91.400 millones el próximo año, lo que representaría un récord histórico.
Velarde también puso en relieve el crecimiento sostenido de las exportaciones no tradicionales, como los productos agroindustriales, textiles y químicos, que se han multiplicado por 15 desde el año 2000. En contraste, las exportaciones tradicionales, como minerales, petróleo y gas, solo se han duplicado en el mismo periodo, lo que muestra una diversificación progresiva de la economía peruana.
En cuanto al panorama interno, resaltó que la masa salarial formal —los ingresos del trabajo formal— ha experimentado un crecimiento real del 7,6%, lo cual representa una mejora en el poder adquisitivo de los trabajadores registrados. A esto se suma una inflación controlada, con una proyección de cierre de 1,7% para este año, dentro del rango meta del BCRP.
El tipo de cambio, otro indicador clave, también se ha mantenido estable. “Comparado con el inicio del siglo, el sol peruano está incluso más fuerte, mientras que en países como Brasil, la moneda local se ha depreciado en casi un 200%; en Colombia y Chile, más de un 70%”, detalló Velarde, subrayando la solidez macroeconómica del Perú.
Respecto al crecimiento del PBI, el BCRP prevé una expansión del 3,2% en 2025 y de 2,9% en 2026, cifras ligeramente inferiores a las del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que proyecta 3,5% y 3,2%, respectivamente, en el Marco Macroeconómico Multianual. Si bien el Consejo Fiscal ha advertido que las proyecciones del MEF son algo optimistas, Velarde consideró que no están fuera de rango ni son exageradas.
“Las estimaciones del MEF pueden ser algo optimistas, pero no demasiado alejadas de las que manejan otros analistas privados. Algunas consultoras internacionales prevén un crecimiento de hasta 3,1%, por lo que no veo que el marco macroeconómico sea preocupante o poco realista”, opinó.
En el plano internacional, Velarde comentó que si bien la incertidumbre global ha disminuido respecto al inicio del año, aún persisten riesgos comerciales, como los aranceles adicionales impuestos por Estados Unidos a países como Rusia o Brasil. También advirtió que el menor crecimiento de China, ahora en torno al 4%, y su transición hacia una economía de servicios y consumo interno, tendrá efectos globales. “La población china se reducirá en un 50% hacia el año 2100. Es un cambio profundo en el modelo económico del país”, advirtió.
Finalmente, Velarde hizo un llamado a realizar reformas estructurales en el Estado y el sistema educativo. “Contamos con sectores con alto potencial y con acceso a tecnología, pero sin una buena educación no podremos sostener el crecimiento. Países desarrollados como Suiza o Japón han prosperado sin grandes recursos naturales, gracias a su capital humano. Si no mejoramos la calidad del servicio civil, difícilmente alcanzaremos niveles adecuados de educación, salud o infraestructura”, concluyó.