La minera brasileña Vale anunció que dejará de utilizar agua en el procesamiento de mineral de hierro en su complejo de Carajás, en el estado de Pará, hacia fines de 2027. Esta transformación permitirá que todo el «Sistema Norte» opere completamente en seco, aprovechando únicamente la humedad natural del mineral. Actualmente, el 90 % de esta operación ya funciona bajo este modelo, lo que elimina la generación de colas (residuos mineros) y reduce la necesidad de construir nuevas represas, además de mejorar la sostenibilidad y eficiencia del proceso.

Entre los beneficios de esta transición destacan la reducción de riesgos ambientales, al evitar el uso de represas que podrían presentar fallas estructurales, así como menores costos operativos relacionados con infraestructura, mantenimiento y seguros. Además, el procesamiento en seco mejora la seguridad de los trabajadores y simplifica el cierre de minas. Esta estrategia también refuerza el compromiso de Vale con los estándares internacionales en materia ambiental, social y de gobernanza (ESG).

Como parte de su apuesta por una minería más sostenible, Vale impulsa también el proyecto Gelado, enfocado en la recuperación de residuos mineros acumulados desde 1985 en el embalse del mismo nombre. Este material se transforma en pellet feed de alta calidad mediante concentración magnética, utilizando dragas eléctricas alimentadas con energía renovable. La producción del proyecto se estima en 2,5 millones de toneladas para 2025, aumentando a 6 millones en 2027.

El impacto ambiental del proyecto Gelado es significativo. Se estima que evitará la emisión de aproximadamente 484 000 toneladas de CO₂ en una década, lo que equivale a retirar de circulación más de 100 000 automóviles compactos. Al mismo tiempo, se reduce la necesidad de nuevas excavaciones y transporte de material, contribuyendo a la preservación del entorno natural en la zona.

Con la mira puesta en 2030, Vale busca que el 10 % de su producción anual provenga de operaciones circulares, lo que incluye reciclaje de residuos, reutilización de arenas descartadas y nuevos métodos para reaprovechar colas. La transformación en Carajás y la expansión del proyecto Gelado marcan pasos importantes en esta transición hacia una minería más responsable, posicionando a Vale como líder en innovación y sostenibilidad dentro del sector minero global.