La minera canadiense Pinnacle Silver and Gold Corp. obtuvo la aprobación condicional de la TSX Venture Exchange (TSXV) para emitir 191,580 acciones ordinarias, correspondientes a la comisión por localización (“finder’s fee”) vinculada a la opción de adquisición del proyecto aurífero y argentífero El Potrero, situado en Durango, México.
Este aval regulatorio permite a la empresa avanzar en la formalización de los compromisos financieros establecidos en el acuerdo definitivo anunciado el 15 de octubre de 2024. Según ese contrato, Pinnacle tiene la posibilidad de adquirir hasta el 100 % del proyecto mediante pagos escalonados en efectivo, emisión de acciones y obligaciones de inversión en exploración.
La aprobación se centra específicamente en la emisión de acciones destinadas al intermediario que facilitó la operación. Este mecanismo, común en compañías mineras junior, remunera a quienes identifican oportunidades de adquisición, especialmente en regiones donde se requiere apoyo local. En este caso, la comisión equivale al 4 % del valor de cada pago estipulado en el acuerdo.
El contrato incluye también hasta 298 mil dólares estadounidenses en efectivo como parte del finder’s fee, distribuidos conforme se alcancen los hitos pactados. El primer pago en acciones fue ejecutado el 24 de febrero de 2025 por un valor equivalente a 20 mil dólares canadienses. Todas las emisiones y desembolsos están pendientes de la aprobación final de la TSXV.
El Potrero se encuentra dentro de la Sierra Madre Occidental, una de las provincias geológicas más ricas en metales preciosos de México. La zona ha sido históricamente activa en minería y cuenta con operaciones en funcionamiento a menos de 35 kilómetros, entre ellas una mina subterránea con capacidad para procesar hasta 4,000 toneladas diarias.
El proyecto alberga un sistema epitermal de baja sulfuración con vetas de oro y plata alojadas en andesitas terciarias. Su historial incluye solo labores artesanales y carece de perforación moderna. Existen tres antiguos trabajos mineros distribuidos a lo largo de un corredor de 500 metros, lo que sugiere continuidad mineralizada pendiente de ser verificada técnicamente.
A nivel de infraestructura, El Potrero posee una planta de procesamiento de 100 toneladas por día, utilizada brevemente a finales de los años 80. La posibilidad de rehabilitar esta instalación representa una ventaja competitiva, al reducir los costos iniciales de una futura operación.
Pinnacle ya inició trabajos de reconocimiento y muestreo geológico con el objetivo de diseñar una primera campaña de perforación diamantina. Aunque aún en etapa temprana, la compañía considera al proyecto como un activo estratégico dentro de su portafolio, tanto por su ubicación como por su potencial de convertirse en una operación mediana.
Con la aprobación condicional para emitir las acciones del finder’s fee, la empresa cumple un paso regulatorio crucial, lo que fortalece la confianza del mercado. En bolsas orientadas al capital de riesgo como la TSXV, la transparencia en este tipo de mecanismos es esencial para garantizar integridad en las transacciones.
El avance de El Potrero también refuerza el atractivo de México como destino minero en Latinoamérica. Pese a ciertos desafíos recientes, el país conserva condiciones geológicas favorables y una infraestructura que sigue captando inversiones, especialmente en proyectos con potencial de rápida reactivación.















