La minera Antapaccay anunció la paralización temporal de sus operaciones en Cusco, tras el ataque a sus instalaciones, registrado ayer, por parte de un grupo de vándalos que irrumpió en la propiedad privada.
En un comunicado, la compañía indicó que ayer, al promediar el mediodía, “un contingente de ciudadanos espinarenses” llegó a sus instalaciones demandando la paralización de sus actividades.
Según Antapaccay, los manifestantes también exigían que la minera emita un comunicado solicitando la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
“Seguidamente, un grupo de vándalos ingresó a nuestras instalaciones saqueando pertenencias de los trabajadores y bienes de la empresa y quemando algunas zonas
del campamento”, se lee en el documento.
“Nuestra prioridad es la seguridad de nuestros trabajadores. Los equipos de Emergencia y de Seguridad están trabajando para garantizar la seguridad de los empleados que se encuentran en la operación, así como para extinguir los incendios generados”, añade.
Situación controlada
Afortunadamente, no se han registrado heridos ni víctimas mortales en estos incidentes.
De acuerdo con la información de Antapaccay, a las 4:30 p.m. de ayer los manifestantes abandonaron las instalaciones de la minera “y la situación se encuentra bajo control”.
“Condenamos enérgicamente estos actos de violencia, demandamos respeto a la integridad de personas y a la propiedad privada, e invocamos a las dirigencias sociales a dialogar con las autoridades nacionales para poner fin a la ola de violencia que sacude al país con un lamentable costo de vidas humanas”, concluyó la compañía.
