La ejecución de proyectos mineros en la zona centro del país, la cual comprende a las regiones de Junín, Pasco y Lima provincias, reduciría sus cifras de pobreza a un 20% con miras al 2031. Este impacto representa 11 puntos porcentuales menos respecto a la tasa actual de pobreza.
Así lo demuestra el estudio “Impacto económico y social de la minería en el Perú Central – Perspectiva histórica y visión hacía el futuro”, que fue presentado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) y el Centro para la Competitividad y Desarrollo (CCD) en la primera jornada del evento Rumbo a PERUMIN edición Perú central.
Dichos proyectos, en el caso de Junín, que tiene una pobreza actual de 27%, permitiría reducirla en 9 puntos porcentuales, pasando a un 18%; en Pasco, pasaría de 41% a 26%; finalmente, en Lima Provincias (Barranca, Cajatambo, Canta, Cañete, Huaral, Huarochirí, Huaura, Oyón y Yauyos), ésta se reduciría de un 27% a un 17%.
“Es importante destacar que la cartera de proyectos de estas tres regiones, concentran un total de US$2,341 millones. Esto significa que, al 2031, la generación a través de canon y regalías sería de S/ 718 millones. Si hacemos el desglose, en Lima provincias se generarían S/ 241 millones, en Pasco S/ 200 millones, y en Junín S/ 276 millones”, señaló Rudy Lagua, director del CCD.
Generación de empleo
Las estimaciones del estudio señalan que, al 2031, con la ejecución de los proyectos mineros en cartera, se lograría que el sector genere puestos de trabajo directos e indirectos para unas 550 mil personas en estas regiones del país. Basándose en los resultados del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) y el Ministerio de Energía y Minas (Minem), actualmente son 367 mil puestos de trabajo los que genera el sector.
Este aumento de empleos impacta igualmente en la cantidad de beneficiarios de las tres regiones, aumentando de 1.4 millones de personas a 2.2 millones. Junín sería el máximo beneficiario, ya que concentraría a un millón de estas.
Algunos de los proyectos que impulsarían los ingresos y empleos en la zona centro son, en Junín, la ampliación de Toromocho (US$ 1.3 millones), Ariana (US$140 millones) y Shalipayco (US$ 91 millones). En Pasco, se encuentran Ayawilca y San Pedro de Pillao (US$264) y Yumpag (US$81 millones). Finalmente, en Lima provincias, se encuentra Río Seco (US$410 millones).
“Perú es un país altamente competitivo en la atracción de inversiones extranjeras. En la lista de reservas mineras, tan solo por cobre, ocupamos el segundo puesto detrás de Chile con un 10% de reservas. Aprovechar esta cartera de proyectos, impulsaría los ingresos de las regiones en cuestión indudablemente”, agregó el economista Laguna.
Cabe destacar que el estudio “Impacto económico y social de la minería en el Perú Central – Perspectiva histórica y visión hacía el futuro” se presenta en el marco de actividades Rumbo a PERUMIN, lo cual es la antesala a la Convención Minera PERUMIN 35, que se llevará a cabo del 26 al 30 de setiembre en la ciudad de Arequipa.