Codelco y SQM informaron la constitución de Nova Andino Litio SpA, sociedad que surge tras la fusión de sus filiales Minera Tarar SpA y SQM Salar SpA. Con ello, se formaliza la empresa conjunta que estará a cargo de la exploración, explotación, producción y comercialización de litio en el Salar de Atacama hasta el año 2060.
La operación fue comunicada mediante un Hecho Esencial a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) y concreta una de las asociaciones público-privadas más relevantes en la historia empresarial de Chile. Este acuerdo combina el liderazgo del Estado, a través de Codelco, con la experiencia operativa y técnica de SQM, bajo un modelo de gobernanza moderno y profesional.
Nova Andino Litio concentrará todos los activos, filiales, oficinas internacionales, permisos, capacidades técnicas y equipos humanos necesarios para el desarrollo del negocio del litio. Esta reorganización, realizada por SQM entre 2024 y 2025, garantiza además la continuidad operacional y contractual en el Salar de Atacama, conforme a los contratos vigentes con Corfo y aquellos que regirán a partir de 2031.
El presidente del directorio de Codelco, Máximo Pacheco, destacó el carácter estratégico de la iniciativa, señalando que la participación en el litio responde a la relevancia de este recurso para la transición energética y digital a nivel global. Asimismo, subrayó que la alianza con SQM representa una nueva forma de colaboración público-privada basada en la transparencia y una visión de largo plazo.
Desde SQM, su gerente general Ricardo Ramos resaltó que la sociedad conjunta permitirá proyectar el desarrollo del Salar de Atacama con altos estándares de excelencia operativa, sostenibilidad y generación de valor compartido, combinando capacidades complementarias en beneficio del país y de los mercados internacionales.
El directorio de Nova Andino Litio estará conformado por tres representantes de Codelco y tres de SQM, y celebrará su primera sesión el próximo 29 de diciembre. Como parte de los compromisos del acuerdo, SQM transfirió a Codelco la totalidad de sus concesiones mineras en el Salar de Maricunga, fortaleciendo la posición estratégica del Estado en ese territorio y generando, además, un impacto positivo en los resultados financieros de Codelco, que se reflejará en sus estados al cierre de 2025.















