La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) presentó este miércoles su Informe de Tendencias del Mercado del Cobre correspondiente al segundo trimestre de 2025. El documento incluye proyecciones actualizadas sobre el precio, la oferta y la demanda del metal rojo para los años 2025 y 2026, reafirmando el rol estratégico del cobre en la economía mundial y la posición clave de Chile como principal productor.
Cochilco decidió mantener su proyección de precio promedio en 4,30 dólares por libra tanto para 2025 como para 2026. Esta estimación responde a un escenario de oferta limitada junto a una demanda que se mantiene sólida, impulsada principalmente por China y otras economías emergentes. La ministra de Minería, Aurora Williams, destacó que estas proyecciones reflejan la confianza global en el cobre chileno y su importancia para un suministro sostenible y responsable.
En relación con la demanda, la directora de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco, Patricia Gamboa, anticipó un crecimiento de 2,3 % para 2025 y de 2,4 % para 2026. Subrayó especialmente el papel de China, donde se espera una recuperación del consumo industrial y una aceleración en proyectos vinculados a energías limpias y almacenamiento. Este comportamiento contribuiría a mantener un mercado estructuralmente ajustado.
Gamboa explicó que la expansión de capacidad en fundiciones, particularmente en Asia, supera al crecimiento de la producción minera, lo que generará un desbalance entre procesamiento y suministro. Este fenómeno, indicó, será un factor clave para sostener precios elevados, incluso si se reduce la volatilidad provocada por factores como aranceles o fluctuaciones en los inventarios globales.
En cuanto a la oferta, Cochilco estima que la producción mundial de cobre mina alcanzará los 22,71 millones de toneladas en 2025, apenas un 0,5 % más que en 2024. Este crecimiento limitado se debe a desafíos operacionales en varias regiones productoras. Sin embargo, se espera un cambio positivo en 2026, con una expansión del 3,2 % que llevaría la producción global a 23,43 millones de toneladas, impulsada por la recuperación en países como Indonesia, Mongolia, Canadá y Rusia.
Para Chile, se proyecta una producción de 5,58 millones de toneladas en 2025, lo que representaría un incremento de 1,5 % respecto al año anterior. En 2026, se espera que esa cifra aumente a 5,75 millones de toneladas, lo que significaría un crecimiento adicional del 3 %, en línea con una mejora en las condiciones operativas y de inversión en el país.
Del lado de la demanda, se estima que en 2025 alcanzará las 26,38 millones de toneladas, con un crecimiento del 2,3 %, impulsado principalmente por Asia emergente y Estados Unidos. Dentro de este escenario, China se mantendrá como el mayor consumidor, con cerca de 15,7 millones de toneladas en 2025 y 15,8 millones en 2026. India destaca como un nuevo protagonista clave, con un aumento proyectado del 7,5 % en 2025 y del 8,5 % en 2026, en medio de su proceso de industrialización y transición energética.
Finalmente, el balance del mercado global para este año anticipa un superávit técnico de 51 mil toneladas, que subiría a 65 mil toneladas en 2026. Aunque no se prevé escasez, Cochilco advierte que el equilibrio es frágil, con escaso margen ante posibles interrupciones de producción o repuntes inesperados en la demanda. Si bien este superávit podría presionar los precios a la baja, factores estructurales como la demanda sostenida y riesgos geopolíticos seguirán dando soporte al valor del cobre.